20 abril 2021 0:28

Portafolio de inversiones

¿Qué es una inversión de cartera?

Una inversión de cartera es la propiedad de una acción, un bono u otro activo financiero con la expectativa de que obtendrá un rendimiento o crecerá en valor con el tiempo, o ambos. Implica la propiedad pasiva o no intervencionista de los activos en contraposición a la inversión directa, lo que implicaría una función de gestión activa.

La inversión de cartera se puede dividir en dos categorías principales:

  • La inversión estratégica implica la compra de activos financieros por su potencial de crecimiento a largo plazo o su rendimiento de ingresos, o ambos, con la intención de conservar esos activos durante mucho tiempo.
  • El enfoque táctico requiere una actividad activa de compra y venta con la esperanza de lograr ganancias a corto plazo.

Comprensión de la inversión de cartera

El término inversiones de cartera cubre una amplia gama de clases de activos que incluyen acciones, bonos del gobierno, bonos corporativos, fideicomisos de inversión inmobiliaria (REIT), fondos mutuos, fondos cotizados en bolsa (ETF) y certificados de depósito bancarios.

Las inversiones de cartera también pueden incluir opciones más esotéricas, incluidas opciones y derivados, como warrants y futuros.

Conclusiones clave

  • Una inversión de cartera es un activo que se compra con la expectativa de obtener un rendimiento o aumentar su valor, o ambos.
  • Una inversión de cartera es pasiva, a diferencia de una inversión directa, que implica una gestión práctica.
  • La tolerancia al riesgo y el horizonte temporal son factores clave a la hora de seleccionar cualquier inversión de cartera.

También hay inversiones físicas como bienes raíces, materias primas, arte, tierra, madera y oro.

De hecho, una inversión de cartera puede ser cualquier posesión que se compre con el propósito de generar una rentabilidad a corto o largo plazo.

Tomando decisiones

La composición de las inversiones en una cartera depende de varios factores. Los más importantes son la tolerancia del inversor al riesgo y el horizonte de inversión. ¿Es el inversor un joven profesional con hijos, una persona madura que espera jubilarse o un jubilado que busca un complemento de ingresos fiable?

Aquellos con una mayor tolerancia al riesgo pueden favorecer las inversiones en acciones de crecimiento, bienes raíces, valores internacionales y opciones, mientras que los inversores más conservadores pueden optar por bonos gubernamentales y acciones de primera clase.



Una inversión de cartera puede ser cualquier cosa, desde una acción o un fondo mutuo hasta bienes raíces o arte.

A mayor escala, los fondos mutuos y los inversores institucionales se dedican a realizar inversiones de cartera. Para los inversores institucionales más grandes, como fondos de pensiones y fondos soberanos, esto puede incluir activos de infraestructura como puentes y carreteras de peaje.

Las inversiones de cartera de inversores institucionales generalmente se mantienen a largo plazo y son relativamente conservadoras. Los fondos de pensiones y los fondos de donación universitaria no se invierten en acciones especulativas.

Inversiones de cartera para jubilación

A los inversores que ahorran para la jubilación se les suele recomendar que se centren en una combinación diversificada de inversiones de bajo coste para sus carteras.

Los fondos indexados se han vuelto populares en las cuentas individuales de jubilación (IRA) y las cuentas 401 (k), debido a su amplia exposición a una serie de clases de activos a un nivel mínimo de gastos. Estos tipos de fondos constituyen participaciones básicas ideales en carteras de jubilación.

Aquellos que deseen un enfoque más práctico pueden modificar las asignaciones de su cartera agregando clases de activos adicionales, como bienes raíces, capital privado y acciones y bonos individuales a la combinación de la cartera.