Enfermo terminal - KamilTaylan.blog
20 abril 2021 4:00

Enfermo terminal

¿Qué es una enfermedad terminal?

Enfermedad terminal es un término médico que se refiere a una persona que tiene una enfermedad que no se puede curar y que eventualmente la conducirá a la muerte. Por lo general, un médico utilizará un rango de días, meses o años para pronosticar la esperanza de vida de una persona que tiene una enfermedad terminal. Durante ese tiempo, el paciente a menudo querrá poner sus asuntos en orden y planificar en consecuencia, incluido el cálculo de sus finanzas y planificación patrimonial.

Conclusiones clave

  • Enfermedad terminal es una condición en la que una persona tiene una enfermedad o malestar incurable que finalmente resultará en su muerte.
  • Las personas con enfermedades terminales a menudo emprenderán una serie de tareas financieras y administrativas con el fin de liquidar sus obligaciones financieras y asignar activos a sus beneficiarios en caso de fallecimiento.
  • La planificación patrimonial, incluidos los testamentos, fideicomisos, poderes notariales y directivas médicas, son tareas importantes a completar, especialmente si uno tiene una enfermedad terminal.

Comprensión de los enfermos terminales

Las personas con enfermedades terminales y las personas más cercanas a ellas tienen que considerar varias tareas administrativas al evaluar el proceso del final de la vida. Entre otros, los temas relevantes incluyen la evaluación del alcance de la cobertura de seguro médico de la persona enferma,  la cobertura por discapacidad, el seguro de vida y los documentos de planificación patrimonial.

Una consideración clave es el costo de vida con la enfermedad y lo que cubrirá el seguro médico de la persona. Las preguntas a responder incluyen comprender el alcance de la cobertura, identificar los máximos de por vida relevantes y determinar la elegibilidad potencial de los tratamientos experimentales y el seguro por discapacidad, incluido el uso de los beneficios por discapacidad del Seguro Social.

Las pólizas de seguro de vida existentes pueden cubrir algunos costos. Por ejemplo, el titular de la póliza puede aprovechar el valor en efectivo que conlleva la póliza, ya sea retirándolo directamente y renunciando al derecho a un beneficio por fallecimiento o pidiendo prestado contra él. Como alternativa, algunos contratos de seguro de vida permiten al titular de la póliza cobrar un beneficio por fallecimiento acelerado que no cuenta contra los ingresos brutos de una persona.

Un  arreglo viático  podría ser otra opción para que la considere una persona con una enfermedad terminal. En este escenario, el asegurado vende su póliza a un tercero que paga un porcentaje del beneficio por fallecimiento normal de la póliza. Similar a un beneficio por muerte acelerado, cualquier producto recibido se excluye del ingreso bruto.

Enfermedad terminal y planificación patrimonial

Es importante que los enfermos terminales y sus asesores revisen y actualicen la información clave relacionada con su patrimonio. Por ejemplo, un testamento vital le da a la persona el control de su tratamiento médico, incluso si debe ser retenido en caso de que la persona quede incapacitada. Este documento también puede denominarse directiva médica anticipada.

Además, se debe redactar, actualizar o revisar una última voluntad y testamento. Hacerlo garantizará que la persona pueda dirigir sus deseos al final de la vida, incluida la asignación de activos, como mejor le parezca. Entre otros elementos, el testamento debe referirse al nombramiento de tutores, albaceas y fideicomisarios. Es posible que la persona con una enfermedad terminal desee asignar un poder de atención médica, que le permite a otra persona tomar decisiones médicas en su nombre, en caso de que no pueda hacerlo. Como parte de ese proceso, el apoderado debe asegurarse de saber cómo desea la persona que proceda su atención médica y de tomar decisiones representativas del plan.

Fuera de la atención médica, otorgar un poder notarial a alguien  en caso de incapacidad puede ser beneficioso a la hora de administrar y, finalmente, resolver los asuntos de una persona. El poder le otorga a otra persona la capacidad de actuar en nombre de otra en términos de asuntos legales, financieros y comerciales.