Habilidades blandas
¿Qué son las habilidades blandas?
Las habilidades blandas son rasgos de carácter y habilidades interpersonales que caracterizan las relaciones de una persona con otras personas. En el lugar de trabajo, las habilidades blandas se consideran un complemento de las habilidades duras, que se refieren al conocimiento y las habilidades ocupacionales de una persona. Los sociólogos pueden usar el término habilidades blandas para describir el cociente de inteligencia emocional (EQ) de una persona en oposición al cociente de inteligencia (IQ).
Las habilidades blandas tienen más que ver con quiénes son las personas que con lo que saben. Como tales, abarcan los rasgos de carácter que deciden qué tan bien uno interactúa con los demás y, por lo general, son una parte definida de la personalidad de un individuo. En un mercado laboral competitivo, los empleados que demuestran tener una buena combinación de habilidades duras y blandas a menudo ven una mayor demanda de sus servicios.
Conclusiones clave
- Las habilidades blandas incluyen atributos y rasgos de personalidad que ayudan a los empleados a interactuar con otros y tener éxito en el lugar de trabajo.
- Los ejemplos de habilidades blandas incluyen la capacidad de comunicarse con posibles clientes, orientar a sus compañeros de trabajo, liderar un equipo, negociar un contrato, seguir instrucciones y hacer un trabajo a tiempo.
- Las habilidades duras se pueden medir y generalmente se obtienen a través de programas formales de educación y capacitación.
- Los trabajadores con buenas habilidades sociales pueden ayudar a las empresas a alcanzar niveles más altos de eficiencia y productividad.
Comprender las habilidades blandas
Los empleadores buscan un equilibrio entre habilidades duras y habilidades blandas al tomar decisiones de contratación. Por ejemplo, los empleadores valoran a los trabajadores calificados con un historial de completar los trabajos a tiempo. Los empleadores también valoran a los trabajadores con sólidas habilidades de comunicación y una sólida comprensión de los productos y servicios de la empresa. Al comunicarse con posibles clientes, los trabajadores con habilidades sociales pueden armar presentaciones convincentes incluso si su trabajo específico no es en ventas o marketing. Otra habilidad blanda valorada es la capacidad de entrenar a compañeros de trabajo en nuevas tareas.
Los líderes de la empresa a menudo son más efectivos cuando tienen fuertes habilidades blandas. Por ejemplo, se espera que los líderes tengan buenas habilidades para hablar, pero los buenos líderes también son buenos para escuchar a los trabajadores y a otros líderes en sus campos. La negociación es una gran parte del trabajo de muchos líderes de empresas. Al negociar con empleados, clientes o asociados, los líderes deben tener la habilidad de ser considerados con lo que los demás quieren y al mismo tiempo concentrarse en presionar por lo que quieren. Los buenos líderes también necesitan saber cómo hacer que su propio trabajo sea más eficiente al delegar tareas estratégicamente a los trabajadores.
A las empresas a menudo les gusta contratar empleados que posean habilidades sociales que se adapten bien al resto del personal, considerándolos como una buena opción cultural para la empresa.
Habilidades duras frente a habilidades blandas
Los trabajadores adquieren habilidades duras a través de la educación formal, los programas de capacitación y el esfuerzo concentrado. Las habilidades duras son las habilidades cuantificables que los trabajadores deben tener para realizar con éxito un trabajo específico. Los empleadores a menudo prueban o evalúan las habilidades duras de un candidato antes de contratarlo. Ejemplos de habilidades duras incluyen programación de computadoras, redacción, desarrollo web y diseño gráfico. Algunas habilidades duras tienen más demanda que otras y los empleadores pueden necesitar contratar agencias de contratación o cazatalentos para cubrir puestos de trabajo que requieren habilidades de alto nivel.
Las habilidades duras se pueden aprender y perfeccionar con el tiempo, pero las habilidades blandas son más difíciles de adquirir y cambiar. Las habilidades sociales requeridas para un médico, por ejemplo, serían empatía, comprensión, escucha activa y una buena actitud al lado del paciente. Alternativamente, las habilidades necesarias para un médico incluirían una vasta comprensión de las enfermedades, la capacidad de interpretar los resultados de las pruebas y los síntomas, y una comprensión profunda de la anatomía y fisiología.
Beneficios de las habilidades blandas
Las habilidades sociales benefician a las empresas cuando se practican en toda la empresa. Por ejemplo, es importante un espíritu de colaboración entre los trabajadores. Los miembros del equipo que pueden trabajar bien con personas de diferentes generaciones y antecedentes son generalmente más productivos y están más capacitados para concentrarse en prioridades comunes. La eficiencia y el rendimiento mejoran cuando los trabajadores colaboran compartiendo conocimientos y herramientas para realizar el trabajo. La capacidad de aprender nuevos métodos y tecnologías también es una habilidad blanda deseada por todos los trabajadores.
Las empresas que valoran el aprendizaje como una habilidad blanda reconocen varios estilos de aprendizaje y alientan a los trabajadores a buscar los métodos que mejor les funcionen. La buena resolución de problemas es una habilidad blanda que también es valiosa para las empresas. Por ejemplo, las empresas pueden operar de manera más eficiente y aumentar la productividad cuando todos los trabajadores saben cómo solucionar problemas de software en lugar de depender del departamento de tecnología de la información (TI) para cada solución.