Rentabilidad de la cartera
¿Qué es el rendimiento de la cartera?
El rendimiento de la cartera se refiere a la ganancia o pérdida obtenida por una cartera de inversiones que contiene varios tipos de inversiones. Las carteras tienen como objetivo generar rendimientos basados en los objetivos establecidos de la estrategia de inversión, así como la tolerancia al riesgo del tipo de inversores a los que se dirige la cartera.
Conclusiones clave
- El rendimiento de una cartera es una referencia a cuánto gana o pierde una cartera de inversión en un período de tiempo determinado.
- Los inversores suelen tener varios tipos de carteras entre sus inversiones, en un esfuerzo por alcanzar un rendimiento equilibrado de la inversión a lo largo del tiempo.
- Las opciones de cartera para inversores pueden incluir fondos de pequeña capitalización frente a fondos de gran capitalización, acciones frente a bonos, ETF y una variedad de otras posibilidades.
Comprensión del rendimiento de la cartera
Los rendimientos de la cartera buscan cumplir con los puntos de referencia establecidos, es decir, una cartera teórica diversificada de tenencias de acciones o bonos y, en algunos casos, una combinación de las dos clases de activos. Los inversores suelen tener uno o más tipos de carteras entre sus inversiones y buscan lograr un retorno de la inversión equilibrado a lo largo del tiempo.
Hay muchos tipos de carteras disponibles para los inversores que van desde fondos de acciones de pequeña capitalización hasta fondos equilibrados que consisten en una combinación de acciones, bonos y efectivo. Muchas carteras también incluirán acciones internacionales y algunas se centrarán exclusivamente en regiones geográficas o mercados emergentes.
Muchos administradores de inversiones eligen carteras que buscan compensar las caídas en ciertas clases de inversiones mediante la propiedad de otras clases que tienden a moverse en direcciones opuestas. Por ejemplo, muchos administradores de inversiones tienden a mezclar bonos y acciones, ya que los precios de los bonos tienden a subir cuando las acciones experimentan fuertes caídas. Esto ayuda a lograr el rendimiento deseado de la cartera a lo largo del tiempo y a suavizar la volatilidad.
Una combinación de clases de activos que tienden a moverse en direcciones opuestas, como acciones y bonos, suele ser una forma inteligente de equilibrar una cartera.
Rentabilidad y reequilibrio de la cartera
Una de las mejores prácticas que siguen muchos inversores es revisar sus carteras al final de cada año y hacer ajustes para seguir cumpliendo sus objetivos de inversión.
Por ejemplo, un inversionista puede tener un año excepcional con un fondo de crecimiento y decidir transferir algunas de esas ganancias a un fondo de valor, anticipando que otros inversionistas eventualmente pueden rotar nuevamente al valor.
Cómo los inversores impactan en la rentabilidad de la cartera
La edad a la que un inversor tiene la intención de retirar dinero de una cartera sigue siendo un factor crítico para seleccionar un objetivo de inversión adecuado. Por ejemplo, un inversionista que está a pocos años de jubilarse quiere proteger las ganancias de su cartera y probablemente invertirá en una combinación de efectivo, mercados monetarios y bonos a corto plazo.
Por el contrario, un inversor joven generalmente busca asumir un riesgo relativamente mayor, invirtiendo en una combinación de acciones, bonos de alto rendimiento y quizás futuros administrados, cada uno de los cuales tiene el potencial de superar la tasa de inflación con el tiempo.
Cabe destacar que el advenimiento de la era de Internet brindó a los inversores acceso casi en tiempo real a los rendimientos del mercado, así como a datos de rendimiento relativo de fácil acceso. Al invertir en un fondo mutuo, los inversores pueden extraer gráficos y rendimientos de fondos en comparación con un índice de referencia, así como el promedio de un grupo de pares, que generalmente se remonta a diez años o más, así como las principales asignaciones de activos de fondos particulares.