19 abril 2021 16:18

Fraude corporativo

¿Qué es el fraude empresarial?

El fraude corporativo se refiere a las actividades ilegales realizadas por un individuo o una empresa que se realizan de manera deshonesta o poco ética. A menudo, este tipo de fraude comercial está diseñado para brindar una ventaja a la persona o empresa que lo perpetra. Los esquemas de fraude corporativo van más allá del alcance del puesto establecido de un empleado y están marcados por su complejidad e impacto económico en el negocio, otros empleados y partes externas.

Conclusiones clave

  • Cuando las empresas se involucran en actividades que son deshonestas o ilegales, se conoce como fraude corporativo.
  • Existen muchas formas de fraude corporativo, incluida la contabilidad falsificada y la tergiversación de servicios o productos.
  • El escándalo de Enron de 2001 es un ejemplo bien conocido de fraude empresarial.

Cómo funciona el fraude corporativo

El fraude corporativo puede ser difícil de prevenir y difícil de detectar. Al crear políticas efectivas, un sistema de controles y contrapesos y seguridad física, una empresa puede limitar el alcance del fraude. El fraude corporativo se considera un delito de cuello blanco.

Tipos de fraude empresarial

Aunque puede llevarse a cabo de diversas formas, el fraude corporativo con frecuencia se lleva a cabo aprovechando la información confidencial o el acceso a activos sensibles y luego aprovechando esos activos para obtener ganancias. El fraude a menudo se oculta detrás de prácticas comerciales legítimas o intercambios para disfrazar la actividad ilícita. Las múltiples partes interesadas involucradas en el fraude corporativo también permiten que un grupo de actores cómplices proteja esquemas de fraude elaborados.

Por ejemplo, los registros de contabilidad financiera de una empresa pueden modificarse para presentar una imagen de ingresos y beneficios elevados en comparación con los resultados financieros reales. Estas acciones se pueden tomar para ocultar deficiencias, como una pérdida neta, ingresos lentos, disminución de las ventas o gastos considerables. Se puede hacer una contabilidad falsa para hacer que la empresa sea más atractiva para los compradores o inversores potenciales o, en última instancia, para evitar que caigan las acciones o la valoración de una empresa pública.

Otras formas de fraude corporativo pueden tener como objetivo disfrazar o tergiversar un servicio o producto que la empresa está desarrollando o tiene en servicio, ocultando sus fallas o defectos. En lugar de invertir en reparar, renovar o rediseñar el producto, los responsables del producto intentan desviar o disfrazar estos problemas. Esto podría hacerse si el departamento o la empresa no tiene las finanzas para corregir el problema o si revelar el problema puede alejar a los clientes e inversores.

Si una empresa o un individuo afirma que está destinando parte de sus fondos a inversiones u otros tipos de reservas monetarias que pretenden ganar en valor, pero en realidad, esos fondos se han gastado o desviado a otra parte, esto cuenta como un tipo de fraude empresarial..

Ejemplo de fraude empresarial

Las prácticas comerciales y contables engañosas que llevaron a la caída de Enron son un ejemplo de fraude empresarial. Debido al uso generalizado de lagunas y otras tácticas de encubrimiento, la empresa ocultó la deuda de los acuerdos fallidos, y la suma ascendió a miles de millones de dólares. Para mantener la farsa, los responsables presionaron a sus auditores para que ocultaran su engaño, que incluyó la destrucción de documentos financieros.