19 abril 2021 14:20

Mejores prácticas

¿Cuáles son las mejores prácticas?

Las mejores prácticas son un conjunto de pautas, ética o ideas que representan el curso de acción más eficiente o prudente, en una situación empresarial determinada. Las mejores prácticas pueden ser establecidas por autoridades, como reguladores u órganos de gobierno, o pueden ser decretadas internamente por el equipo de administración de una empresa.

Cómo funcionan las mejores prácticas

Las mejores prácticas sirven como marco general para una variedad de situaciones. Por ejemplo, en las empresas que producen productos físicos, se puede proporcionar a los empleados una lista de las mejores prácticas, destacando la forma más eficiente de completar sus tareas individuales. La lista de mejores prácticas también puede delinear los procedimientos de seguridad para minimizar las lesiones de los empleados.

Para los contadores corporativos, los principios de contabilidad generalmente aceptados (GAAP) representan las mejores prácticas que generalmente rigen el nivel de detalle que se alienta a una empresa a revelar en sus estados financieros, para garantizar que los posibles inversores puedan analizar y extraer fácilmente información útil.

GAAP también facilita la comparación cruzada de información financiera entre diferentes empresas dentro del mismo sector, lo que beneficia tanto a los inversores como a las empresas en las que invierten, porque promueve la transparencia. Después de todo, un inversor que compra acciones de una empresa por error podría deshacerse de su posición, al experimentar la más mínima decepción inesperada, lo que, en consecuencia, podría deprimir el precio de la acción.

Los administradores de inversiones pueden seguir las mejores prácticas al manejar el dinero de un cliente invirtiendo prudentemente en una cartera bien diversificada y adhiriéndose a las tolerancias de riesgo, los horizontes de tiempo y los objetivos de jubilación del cliente.

Consideraciones Especiales

Las «mejores prácticas» es un término que se puede aplicar ampliamente y en una amplia gama de industrias. En el mundo de los negocios, la frase se usa en relación con todo, desde la gestión de proyectos hasta las funciones de auditoría, para explicar el método más eficiente de completar una tarea comercial.

Ahora, con el advenimiento de nuevos sistemas de control de calidad, surgió la necesidad de una forma de aplicar puntos de referencia medibles y comunicar formas de implementar rápidamente nuevos estándares de excelencia en una organización mediante la identificación de problemas, la cuantificación de sus frecuencias, el cultivo de soluciones y el seguimiento de la ejecución de esas soluciones para garantizar que resuelvan los problemas centrales en cuestión.

Prácticas recomendadas como puntos de referencia de la industria

Las mejores prácticas también se pueden utilizar como punto de referencia, donde una empresa puede compartir soluciones viables con otras organizaciones. Por ejemplo, digamos que una empresa es conocida por su infraestructura de distribución de productos premiada y la mejor en su clase. Cuando se le pide que describa con precisión las mejores prácticas que llevaron a su hipereficiencia, la compañía revela que equipa a todos los empleados de cumplimiento con marcadores rojos que pueden usar para firmar sus entregas de mayor prioridad.

En consecuencia, todas las órdenes de tinta roja reciben niveles de escrutinio más altos que otras. A medida que más ojos buscan errores de forma reflexiva cuando ven tinta roja, se pueden marcar y corregir más errores.

[Importante: aunque las empresas comparten sus mejores prácticas de forma rutinaria, no sería prudente revelar ciertos secretos comerciales que la competencia podría reproducir fácilmente].