Ganancias normalizadas
¿Qué son las ganancias normalizadas?
Las ganancias normalizadas se ajustan para eliminar los efectos de la estacionalidad, los ingresos y los gastos que son influencias inusuales o únicas. Las ganancias normalizadas ayudan a los propietarios de empresas, analistas financieros y otras partes interesadas a comprender las verdaderas ganancias de una empresa a partir de sus operaciones normales. Un ejemplo de esta normalización sería eliminar la venta de un terreno de los estados financieros de una empresa minorista en la que se realizó una gran ganancia de capital, ya que vender productos, no vender terrenos, es el negocio real de la empresa.
Comprensión de las ganancias normalizadas
Las ganancias normalizadas representan las ganancias de una empresa que omiten los efectos de los cargos o ganancias no recurrentes. Para presentar mejor el negocio principal de una empresa, los efectos únicos de estas ganancias o pérdidas se eliminan, ya que pueden enturbiar el panorama. Además, las ganancias normalizadas se pueden utilizar para presentar las ganancias de una empresa teniendo en cuenta los ciclos de ventas estacionales o cíclicos.
En resumen, las ganancias normalizadas son la evaluación más precisa de la verdadera salud y desempeño financiero de una empresa. Muchas empresas incurren en gastos extraordinarios, como altos honorarios de abogados, o obtienen ganancias extraordinarias, como la venta de equipo antiguo. En ambos casos, aunque los costos e ingresos se realizan y afectan el flujo de efectivo a corto plazo de la empresa, no son indicadores del desempeño a largo plazo de la empresa. Para analizar adecuadamente la empresa, estos efectos deben eliminarse.
Conclusiones clave
- Los ingresos normalizados eliminan los eventos únicos y suavizan los efectos estacionales en los ingresos.
- Las ganancias normalizadas representan mejor la verdadera salud del negocio principal de una empresa.
- Las ganancias por acción normalizadas se pueden utilizar para comparar dos empresas en las que una ha sufrido o se ha beneficiado de una serie de eventos únicos.
Ejemplos de ganancias normalizadas
La forma más común de normalización de ganancias ocurre cuando se deben eliminar los gastos o los ingresos, o se deben suavizar los ciclos de ventas. Al normalizar costos o ganancias grandes y únicos, existen dos tipos de ajustes de normalización. Si, por ejemplo, una empresa que posee una flota de camiones decide vender los activos depreciados y comprar otros nuevos, tanto las ganancias como los gastos de la venta se eliminan para normalizar sus ganancias. Un contador o analista haría esto mirando el estado de resultados de la empresa y eliminando el dinero generado de otros ingresos integrales. Luego eliminaría los gastos operativos o el financiamiento de la deuda utilizado para comprar los nuevos camiones.
Otro escenario en el que se eliminan los gastos para normalizar las ganancias de una empresa es en el caso de una adquisición o compra. Cuando esto ocurre, se eliminan los sueldos, salarios y demás gastos pagados a los propietarios y funcionarios de la empresa, ya que no formarán parte de la nueva organización.
El escenario restante que comúnmente implica la normalización es el de las ganancias de las empresas con ciclos de ventas o estacionalidad. En situaciones como esta, las ganancias se ajustan utilizando un promedio móvil durante varios períodos. La forma más simple de esto es un promedio aritmético. Si, por ejemplo, una empresa gana $ 100 en enero, $ 150 en febrero y $ 200 en marzo, y usa un promedio móvil de dos meses, sus ganancias normalizadas serían $ 125 para febrero y $ 175 para marzo.
La ventaja de las ganancias normalizadas
Para los inversores, la mayor ventaja de las ganancias normalizadas es que permite una comparación más precisa entre empresas. Las métricas comunes, como las ganancias por acción (EPS), pueden verse afectadas drásticamente por el período en el que se calculan, especialmente si se produce un costo o beneficio significativo no relacionado con el negocio principal en el período. Al utilizar las ganancias por acción normalizadas, los inversores pueden analizar y comparar mejor las empresas en función de la salud de sus operaciones principales en lugar del impulso temporal o el impacto de un evento único.