Cómo calcular el rendimiento esperado de la cartera
Como inversionista bien informado, naturalmente desea conocer el rendimiento esperado de su cartera: su rendimiento anticipado y las ganancias o pérdidas generales que está acumulando. El rendimiento esperado es solo eso: esperado. No está garantizado, ya que se basa en rendimientos históricos y se utiliza para generar expectativas, pero no es una predicción.
conclusiones clave
- Para calcular el rendimiento esperado de una cartera, un inversor debe calcular el rendimiento esperado de cada una de sus posiciones, así como el peso total de cada posición.
- La fórmula básica de rendimiento esperado implica multiplicar el peso de cada activo en la cartera por su rendimiento esperado y luego sumar todas esas cifras.
- El rendimiento esperado generalmente se basa en datos históricos y, por lo tanto, no está garantizado.
Cómo calcular el rendimiento esperado
Para tasas de rendimiento anticipadas (RoR) de cada valor.
Un inversor basa las estimaciones del rendimiento esperado de un valor en la suposición de que lo que se ha demostrado que es cierto en el pasado seguirá haciéndolo en el futuro. El inversor no utiliza una visión estructural del mercado para calcular el rendimiento esperado. En cambio, encuentra el peso de cada título en la cartera tomando el valor de cada uno de los títulos y dividiéndolo por el valor total del título.
Una vez que se conoce el rendimiento esperado de cada valor y se ha calculado el peso de cada valor, un inversor simplemente multiplica el rendimiento esperado de cada valor por el peso del mismo valor y suma el producto de cada valor.
Fórmula de rendimiento esperado
Digamos que su cartera contiene tres valores. La ecuación de su rendimiento esperado es la siguiente:
El rendimiento esperado se basa en datos históricos, por lo que los inversores deben tener en cuenta la probabilidad de que cada valor logre su rendimiento histórico dado el entorno de inversión actual. Es más probable que algunos activos, como los bonos, coincidan con sus rendimientos históricos, mientras que otros, como las acciones, pueden variar más ampliamente de un año a otro.
Limitaciones del retorno esperado
Dado que el mercado es volátil e impredecible, calcular el rendimiento esperado de un valor es más conjeturas que definitivas. Por lo tanto, podría causar imprecisiones en el rendimiento esperado resultante de la cartera general.
Los rendimientos esperados no pintan una imagen completa, por lo que tomar decisiones de inversión basadas únicamente en ellos puede ser peligroso. Por ejemplo, los rendimientos esperados no tienen en cuenta la volatilidad. Los valores que van desde altas ganancias hasta pérdidas de un año a otro pueden tener los mismos rendimientos esperados que los valores estables que se mantienen en un rango más bajo. Y como los rendimientos esperados son retrospectivos, no tienen en cuenta las condiciones actuales del mercado, el clima político y económico, los cambios legales y regulatorios y otros elementos.