20 abril 2021 3:15

Shock de declaración

¿Qué es Statement Shock?

Shock de declaración es un término de la jerga común que se usa para transmitir el tipo de sensación de sacudida inquietante asociada con la apertura de una declaración de inversión y ver que el valor de su cartera ha caído más de lo esperado.

Conclusiones clave

  • El shock de declaración es una reacción negativa inmediata de un inversor a un estado financiero decepcionante con respecto a los rendimientos de su inversión.
  • Es más común entre inversores sin experiencia que pueden tener expectativas demasiado optimistas sobre la consistencia de los rendimientos que deberían esperar.  
  • El impacto de la declaración puede provocar una angustia emocional grave y reacciones potencialmente perjudiciales por parte de los inversores. 

Comprensión del shock de declaración

El impacto de una declaración se relaciona con una fuerte reacción emocional, generalmente negativa o perturbadora, después de ver un estado financiero. Es más común que ocurra como resultado de una caída inesperada en el valor, pero también puede ser causado por retornos menores a los esperados.

Muchos inversores contribuirán a un fondo de inversión y recibirán estados de cuenta periódicos por correo de forma mensual, trimestral o anual. El inversor promedio generalmente no sigue las fluctuaciones diarias de su cartera y, por lo tanto, se sorprenderá al recibir su actualización al ver un gran cambio en el valor de un estado de cuenta al siguiente.

Es más probable que se produzca un shock de declaración después de grandes caídas en el mercado. Cuando el mercado o la economía en general declinan, esto normalmente creará un efecto dominó que se reflejará en el desempeño de las acciones minoristas.

Evitar el impacto de las declaraciones

En reacción al impacto de una declaración, los individuos pueden instintivamente tomar decisiones de inversión espontáneas y emocionales. En muchos casos, esto empeora la situación porque actúan con pánico y desesperación sin pensar seriamente en su estrategia a largo plazo. Las ventas de pánico, el cierre de una cuenta o el deterioro de la inversión en general debido a un solo trimestre de desempeño mediocre pueden sabotear las ganancias a largo plazo.

Este tipo de respuesta es más probable entre inversores relativamente inexpertos, que pueden no estar preparados psicológicamente para la actividad de altibajos de la montaña rusa que puede ser una parte rutinaria de un ciclo de inversión normal. Es posible que estos inversores tampoco se den cuenta de que las caídas repentinas o de corto plazo a menudo pueden nivelarse en gran parte con el tiempo. Por tanto, con frecuencia se puede evitar el impacto en las declaraciones cuando los inversores adoptan una visión más mesurada de la inversión y se centran en los objetivos a largo plazo en lugar de en los resultados a corto plazo.

Por otro lado, los inversores que están próximos a jubilarse o que ya están jubilados también pueden ser sensibles al impacto de las declaraciones. Debido a sus horizontes de tiempo relativamente cortos, estos inversores pueden estar más justificados al ver los resultados a corto plazo como un problema más urgente. En este caso, seguir una estrategia de inversión que gestione cuidadosamente el riesgo con el fin de evitar la volatilidad de los rendimientos a corto plazo en primer lugar es el nombre del juego.

Los inversores deben centrarse en el panorama general y concentrarse en los objetivos a largo plazo y las ganancias que puedan obtener en el futuro, en lugar de obsesionarse con las fluctuaciones repentinas y probables a corto plazo. Las reacciones emocionales como las asociadas con el impacto de una declaración pueden causar una ansiedad considerable y pueden tener un costo psicológico significativo en los inversores.

En un contexto que no es de inversión, el shock de declaración a veces también se puede usar para referirse a la sensación inquietante que un consumidor puede tener al recibir el resumen de su tarjeta de crédito, particularmente si ha perdido la cuenta de sus gastos o se ha ido de compras. También puede referirse a una respuesta emocional severa a cualquier tipo de estado de cuenta.