Monopolista
¿Qué es un monopolista?
Un monopolista es un individuo, grupo o empresa que controla todo el mercado de un bien o servicio en particular. Un monopolista probablemente también crea en políticas que favorecen a los monopolios, ya que les da mayor poder. Un monopolista tiene pocos incentivos para mejorar su producto porque los clientes no tienen alternativas. En cambio, su motivación se centra en proteger el monopolio.
Conclusiones clave
- Un monopolista se refiere a un individuo, grupo o empresa que domina y controla el mercado de un bien o servicio específico.
- Esta falta de competencia y la falta de bienes o servicios sustitutos significa que el monopolista ejerce suficiente poder en el mercado para cobrar precios altos.
- Si bien ser el actor único o dominante en un sector no es ilegal en sí mismo, puede generar sanciones gubernamentales si el comportamiento del monopolista comienza a limitar drásticamente el libre mercado.
- El gobierno de los Estados Unidos regula la competencia desleal haciendo cumplir las leyes antimonopolio, que restringen los monopolios y protegen a los consumidores de prácticas comerciales predatorias.
- Algunos monopolios son legales y sancionados por el gobierno, como las empresas del sector de servicios públicos.
Entendiendo a los monopolistas
Los monopolios existen cuando un monopolista se convierte en el único proveedor de un producto o servicio en particular. Esto es diferente de un monopsonio, que se refiere al poder exclusivo de una sola entidad para comprar un bien o servicio. También es diferente de un oligopolio, que consiste en unos pocos vendedores que dominan un mercado.
El sello distintivo de un monopolio es la falta de competencia económica para producir el bien o servicio, la falta de bienes sustitutos viables y la posibilidad de un alto precio de monopolio muy por encima del costo marginal del vendedor que conduce a una ganancia excesiva.
En economía, un monopolio es un solo vendedor. Sin embargo, según la ley, un monopolio solo necesita ser una entidad comercial que tenga un poder de mercado significativo, suficiente poder para cobrar precios excesivamente altos. Aunque los monopolios pueden ser grandes empresas, el tamaño no es una característica necesaria de un monopolio.
Una pequeña empresa aún puede tener el poder de subir los precios en una pequeña industria. Los monopolios pueden ser establecidos por un gobierno, formarse orgánicamente o formarse mediante la fusión de empresas u organizaciones anteriormente independientes.
Crítica a los monopolistas
En muchas jurisdicciones, como Estados Unidos, existen leyes que restringen los monopolios. Ser el jugador único o dominante en un mercado a menudo no es ilegal en sí mismo. Sin embargo, ciertas categorías de comportamiento monopolístico pueden considerarse abusivas en un mercado libre, y tales actividades a menudo atraerán la etiqueta de monopolio y las sanciones legales que la acompañan.
Cuando una empresa es el único proveedor de un bien o servicio, puede volverse lo suficientemente poderosa como para evitar que otras empresas ingresen al mercado y generen competencia. Con la falta de opciones alternativas en el mercado, los consumidores a menudo no tienen más remedio que pagar los precios más altos que exige el monopolista o prescindir del producto o servicio deseado.
Los gobiernos promulgan y hacen cumplir leyes antimonopolio para penalizar a los monopolistas y garantizar una competencia leal en el mercado. Estas leyes protegen a los consumidores de prácticas comerciales depredadoras, como el aumento de precios. En algunos casos, el gobierno puede intervenir y forzar la ruptura del monopolio.
Monopolio otorgado por el gobierno
Un monopolio otorgado por el gobierno o un monopolio legal, por el contrario, es sancionado por el estado, a menudo para proporcionar un incentivo para invertir en una empresa arriesgada o enriquecer a un grupo de interés nacional. Las patentes, los derechos de autor y las marcas comerciales se utilizan a veces como ejemplos de monopolios otorgados por el gobierno. En los Estados Unidos, muchas empresas del sector de servicios públicos son un ejemplo de monopolios otorgados por el gobierno. Un gobierno también puede reservarse una empresa para sí mismo y formar un monopolio gubernamental.
Características de un verdadero monopolista
Un monopolista tiene el control total de un mercado y es el único proveedor que proporciona un bien o servicio a muchos consumidores. Más allá de eso, sin embargo, hay ciertas características de un monopolista que se destacan por encima de otros:
- La principal preocupación de un monopolista es maximizar las ganancias a toda costa.
- Un monopolista tendrá el poder de decidir arbitrariamente el precio de los bienes o productos que se venderán. Por lo general, esta decisión se toma de tal manera que los precios se mantengan lo más altos posible mientras se satisface la demanda de los consumidores.
- El monopolista puede tomar medidas extremas para asegurarse de que otros vendedores no puedan hacer negocios dentro del territorio.
- Debido a la falta de competencia, el monopolista puede tardar en realizar mejoras en el producto o responder a las quejas de los consumidores.