Gestión del dinero para estudiantes universitarios
Ingresar a la universidad es una aventura emocionante ya veces intimidante para muchos adultos jóvenes; a menudo es la primera vez que muchos abandonan la calidez y la seguridad del hogar de sus padres y tienen que vivir y arreglárselas por su cuenta. Un área específica que causa dificultades a los adultos jóvenes es aprender a hacer un presupuesto. A continuación, se muestra cómo los estudiantes universitarios pueden administrar su dinero de manera más efectiva mientras continúan su educación.
Conclusiones clave
- Los estudiantes universitarios deben establecer un presupuesto autoaplicable.
- Utilizar planes de alimentación y compartir los gastos con los compañeros de habitación puede ayudar a ahorrar dinero.
- Los estudiantes deben investigar formas económicas de comprar artículos y suministros esenciales.
- Aprender a distinguir entre compras esenciales y no esenciales también es una táctica clave de administración del dinero.
Inscríbase en un plan de comidas
Un plan de comidas es un programa prepago en el que una cantidad fija de dinero cubre sus comidas en el campus cada semestre. Suponiendo que la institución educativa ofrece la opción (en algunas escuelas, es obligatorio o simplemente se incluye en un costo total de alojamiento y comida), un plan de comidas puede ahorrar una cantidad considerable, especialmente si tiene una variedad de niveles o arreglos; no tiene sentido en pagando tres comidas al día si habitualmente se saltea el desayuno).
Aunque uno puede debatir si los planes de comidas resultan más baratos que los alimentos preparados en casa, es probable que sea más económico que comer en restaurantes todo el tiempo, y ciertamente son más convenientes. Puede comprar un almuerzo o un refrigerio cuando lo desee y no tiene que tomarse el tiempo para ir de compras o cocinar usted mismo.
Comparta gastos con un compañero de cuarto
Cuando se trata de vivir en un dormitorio, puede esperar vivir en espacios reducidos con otro estudiante. Otra forma en que puede reducir su costo mientras vive en la universidad es hacer cosas con su compañero de cuarto, por ejemplo, electrodomésticos o muebles. O puede agrupar recursos para la lavandería u otros servicios.
Ahorre en suministros
Es fácil ahorrar dinero en muchos artículos de útiles universitarios, incluso si vive en el campus. Antes de ir directamente a la librería del campus, pregunte si hay una librería usada cerca (es probable que la haya en una ciudad universitaria), o visite sitios como Amazon o bookfinder.com; podría ahorrar una cantidad considerable de dinero en sus libros de texto, incluso en las nuevas ediciones.
En particular, el sitio eCampus.com se jacta de que puede ahorrar a los estudiantes universitarios hasta un 90% en libros de texto nuevos y usados, y le permite alquilarlos y comprarlos. Además, podría ahorrarse aún más dinero si considera descargar su libro de texto a un lector electrónico o tableta.
Si está buscando ahorrar en otros suministros, como carpetas de tres anillas y papel de hojas sueltas, considere comprar al por mayor en una tienda de suministros de oficina como Staples (otro artículo que puede compartir con su compañero de cuarto u otros estudiantes).
Determine qué es esencial y no esencial
Otro punto de dificultad para muchos estudiantes universitarios es determinar la diferencia entre elementos esenciales y no esenciales. Los artículos esenciales son cosas que necesita para la vida y la higiene diarias (alimentos, ropa, artículos de tocador) y, posiblemente, para su educación (libros, computadora portátil, etc.).
Los artículos no esenciales son productos que no necesita para la vida diaria, como zapatillas nuevas o iPad. Los no esenciales son cosas que son «agradables de tener» pero no elementos «imprescindibles». Aunque puede ser difícil al principio, limite sus gastos para incluir solo los artículos esenciales hasta que se acostumbre a vivir dentro de sus posibilidades.
Cuidado con el gasto impulsivo
Puede ser muy tentador gastar su dinero en cosas que desea pero que no necesita, ese cuarto par de zapatillas, o en actividades recreativas. La presión de grupo está a tu alrededor y los padres no están cerca para decir que no.
Por supuesto, eso no quiere decir que nunca puedas derrochar, darte un gusto o socializar porque te costará dinero. Pero establezca una asignación: haga un presupuesto de cuánto gastará en artículos o eventos discrecionales cada mes.
La línea de fondo
Ingresar a la universidad es un hito emocionante, y si es la primera vez que estás fuera de casa, también puede ser estresante. Empiece económicamente con el pie derecho estableciendo un presupuesto sólido cuando entre en el campus. Ahorre dinero donde pueda, comparta los gastos con un compañero de cuarto o amigo y, lo más importante, sea consciente de sus gastos.