Separación legal
¿Qué es una separación legal?
Una separación legal es un arreglo ordenado por la corte por el cual una pareja casada vive separada y lleva vidas separadas. Una separación legal es una alternativa popular al divorcio cuando las partes no están seguras del estado de su matrimonio pero quieren establecer límites y responsabilidades financieras, como separación de bienes, custodia de dependientes y manutención de los hijos. Sin embargo, para quienes desean divorciarse, es posible que se requiera una separación legal antes de que un juez otorgue el divorcio.
Conclusiones clave
- Una separación legal es un acuerdo ordenado por un tribunal en el que una pareja casada vive vidas separadas, generalmente viviendo separados.
- La orden de la corte de separación puede especificar obligaciones financieras, acuerdos de custodia y visitación de los hijos y manutención de los hijos.
- Para algunas personas, se prefiere una separación legal al divorcio debido a creencias religiosas, razones económicas y en beneficio de los hijos menores.
- Los cónyuges separados pueden tener derecho a ciertos beneficios aunque estén legalmente separados.
Cómo funciona una separación legal
Aunque las razones para buscar una separación legal varían, hay algunas comunes que vale la pena mencionar. Algunas religiones prohíben que las parejas casadas se divorcien; una separación legal otorga la mayoría de los beneficios de un divorcio sin comprometer los principios religiosos. Además, aquellos que no están seguros de su futuro matrimonial pueden optar por una separación legal, con la esperanza de una reconciliación. Las parejas con hijos menores suelen citar que una separación legal es más ideal para sus hijos que un divorcio. Aunque los padres funcionan como una unidad separada, la familia puede permanecer unida, manteniendo la estabilidad y el orden, en su mayor parte. Algunas otras razones para optar por este arreglo es conservar los beneficios de salud y jubilación.
Muchas parejas optan por separarse sin una orden judicial, ya que es más simple y evita costosos procedimientos legales. La creciente tendencia hacia las separaciones informales y los divorcios sin culpa hace que el proceso de separación legal formal sea cada vez más raro.
Una vez que se determina la fecha real de separación, congela la capacidad de un cónyuge para gastar libremente dinero de una tarjeta de crédito conjunta o cuenta bancaria. También limita el control sobre otros activos como propiedades y vehículos.
Cada cónyuge se vuelve legalmente responsable de su deuda después de la fecha de separación.
Es importante tratar una separación legal tan seriamente como un divorcio, ya que ambas son órdenes de la corte, que contienen deberes y obligaciones que cada parte debe cumplir legalmente. Si la pareja se divorcia más tarde, los jueces pueden considerar los detalles del acuerdo de separación al decidir sobre un divorcio.
Beneficios de la separación legal
Para algunos, llegar a su décimo aniversario es una ocasión monumental, pero también es un hito cuando se ven afectados los beneficios futuros. Si decide separarse, una separación legal puede mantener intactos los derechos a las prestaciones. Por ejemplo, los cónyuges militares deben permanecer casados durante una década para aprovechar los beneficios proporcionados por la Ley de protección del ex cónyuge de los servicios uniformados.
Además, permanecer casado durante al menos 10 años significa poder aprovechar ciertos beneficios de la seguridad social conyugal. Si en el momento de la jubilación, su cónyuge recibirá más seguridad social que usted, es beneficioso permanecer casado durante un mínimo de 10 años para que pueda obtener una suma mayor utilizando la jubilación de la seguridad social de su cónyuge.
A pesar del dolor de una separación, a veces una separación legal tiene sentido cuando un divorcio no lo tiene. Por ejemplo, una separación legal puede ser temporal, mientras que un divorcio es permanente. Algunas parejas se separan legalmente cuando las separaciones de prueba no funcionan. Este puede ser el último intento de salvar su matrimonio.
Además, una separación legal suele ser más rentable que un divorcio, y muchos padres descubren que sus hijos pueden adaptarse mejor al divorcio si primero se separan legalmente.