19 abril 2021 20:54

Espionaje industrial

¿Qué es el espionaje industrial?

El término espionaje industrial se refiere al robo ilegal y poco ético de secretos comerciales para que los utilice un competidor para lograr una ventaja competitiva. Esta actividad es una práctica encubierta que a menudo realiza una persona con información privilegiada o un empleado que obtiene un empleo con el propósito expreso de espiar y robar información para un competidor. El espionaje industrial lo llevan a cabo empresas con fines comerciales y no los gobiernos con fines de seguridad nacional.

Conclusiones clave

  • El espionaje industrial es el robo ilegal y poco ético de secretos comerciales para que los utilice un competidor para lograr una ventaja competitiva.
  • A menudo lo hace una persona con información privilegiada o un empleado que obtiene un empleo con el propósito expreso de espiar y robar información para un competidor.
  • El espionaje industrial ha crecido con la ayuda de Internet y las prácticas laxas de ciberseguridad.

Comprensión del espionaje industrial

El espionaje industrial describe una serie de actividades encubiertas en el mundo empresarial, como el robo de secretos comerciales mediante la eliminación, copia o registro de información confidencial o valiosa en una empresa. La información obtenida está destinada a ser utilizada por un competidor. El espionaje industrial también puede implicar sobornos, chantajes y vigilancia tecnológica.

También conocido como espionaje corporativo o espionaje o espionaje económico, el espionaje industrial se asocia más comúnmente con industrias de tecnología pesada, en particular los sectores informático, biotecnológico, aeroespacial, químico, energético y automotor , en los que se gasta una cantidad significativa de dinero en investigación y desarrollo (I + D).

Los mayores practicantes de espionaje industrial del mundo corresponden a empresas de países con las mayores economías. Una de las razones por las que las empresas se dedican al espionaje industrial es para ahorrar tiempo y grandes sumas de dinero. Después de todo, puede llevar años llevar productos y servicios al mercado, y los costos pueden acumularse.

En los últimos años, el espionaje industrial ha crecido con la ayuda de Internet y las prácticas laxas de ciberseguridad, aunque estos actos se han vuelto más fáciles de detectar. Las redes sociales son una nueva frontera para el espionaje industrial y aún se está midiendo su pleno impacto y utilidad. Las sanciones por espionaje industrial pueden ser significativas, como se vio en 1993 cuando Volkswagen robó secretos comerciales de General Motors, lo que provocó una multa de 100 millones de dólares.

Consideraciones Especiales

El espionaje industrial tiende a involucrar trabajos internos en los que los empleados roban secretos para obtener ganancias financieras o para dañar a las empresas objetivo. En ciertos casos, y más improbables, las personas pueden irrumpir en las instalaciones de una empresa para robar documentos, archivos de computadora o buscar en la basura de la empresa información valiosa. Sin embargo, existe una mayor posibilidad de que un espía industrial utilice Internet para piratear la red de una empresa y obtener acceso a secretos comerciales en las computadoras y servidores del trabajo. También pueden llevarlo a cabo los gobiernos si persiguen objetivos económicos o financieros.

Un área relativamente nueva del espionaje industrial implica negar a un competidor el uso de su información, servicios o instalaciones mediante malware informático, software espía o un ataque distribuido de denegación de servicio (DDoS). Estas herramientas de espionaje industrial son útiles para explotar sistemas vulnerables.

Tipos de espionaje industrial

El espionaje industrial se puede dividir en dos tipos. El primero y más común busca activamente recopilar inteligencia sobre una empresa u organización. Puede incluir el robo de propiedad intelectual, como procesos de fabricación, fórmulas químicas, recetas, técnicas o ideas. El espionaje industrial también puede implicar el ocultamiento o la negación del acceso a información clave relacionada con precios, licitaciones, planificación, investigación y más. Esta práctica está destinada a crear una ventaja competitiva para la parte que tiene la información.

Espionaje industrial frente a inteligencia competitiva

El espionaje industrial debe diferenciarse de la inteligencia competitiva. Esta última, también llamada inteligencia corporativa, es la recopilación legal de información pública mediante el examen de publicaciones corporativas, sitios web y solicitudes de patente para determinar las actividades de una corporación. A diferencia del espionaje industrial, la inteligencia competitiva es una práctica ética, en la que la información puede recopilarse de una o varias fuentes. Ayuda a las empresas a comprender el panorama competitivo, así como todos los desafíos que pueda presentar.