Precios históricos
¿Qué es el precio histórico?
El precio histórico es un método de precio unitario que se utiliza para calcular el valor de un activo utilizando el último punto de valoración calculado. Los precios históricos se utilizan cuando el valor de un activo no se actualiza en tiempo real.
Conclusiones clave
- El precio histórico es un método para calcular el valor liquidativo (NAV) de una inversión en función de los cambios con respecto a su valoración anterior.
- Los inversores que utilizan precios históricos pueden calcular con precisión el número total de acciones o unidades que comprará una determinada cantidad de dólares, pero corren el riesgo de que la última valoración quede obsoleta.
- Los precios a plazo del NAV se utilizan con más frecuencia que los precios históricos.
Comprensión de los precios históricos
Los precios históricos ilustran la importancia de comprender cuándo se calcularon los valores de los activos por última vez, ya sea en un momento determinado o en varios momentos durante el día de negociación o en tiempo real. Esto se conoce como el punto de valoración. Si un inversor opera en el punto exacto en que se calcula el valor liquidativo (NAV), entonces no tiene que considerar las brechas en el tiempo como parte de su estrategia de inversión.
Sin embargo, si un inversor negocia el activo antes o después de que se haya determinado el valor del activo neto, estará trabajando con un valor antiguo (obsoleto). Esto significa que puede existir el riesgo de que la valoración estimada en la que se basó la decisión comercial sea, de hecho, inexacta.
Los fondos mutuos normalmente actualizan sus valores liquidativos al final del día de negociación. Los gestores de fondos tienen dos opciones: pueden consultar el último valor liquidativo calculado (también conocido como punto de valoración histórico) o pueden anotar el valor liquidativo del siguiente punto de valoración.
Un inversionista que busca comprar un fondo basado en precios históricos sabe cuántas acciones se pueden comprar por una cierta cantidad de dinero porque se conoce el punto de valoración. A su vez, los vendedores saben exactamente cuánto dinero pueden obtener por una cantidad específica de acciones. El riesgo del comprador es que el valor liquidativo del fondo en realidad disminuya en el siguiente punto de valoración, lo que significa que habrá gastado más en una determinada cantidad de acciones. El riesgo para el vendedor es que las acciones aumenten de valor en el siguiente punto de valoración, lo que significa que el vendedor no gana tanto dinero por una determinada cantidad de acciones.
Precios a plazo frente a precios históricos
La fijación de precios a plazo es el método de cálculo del valor liquidativo más utilizado. La fijación de precios a plazo implica procesar órdenes de compra y venta de acciones de fondos mutuos de capital variable al valor liquidativo a partir del próximo cierre del mercado.
En particular, los fondos mutuos de capital variable revalúan sus activos al cierre del día de negociación. Los compradores están en desventaja porque no saben cuántas acciones de fondos se pueden comprar. Este mecanismo de precios asegura que las acciones se compren y vendan a un precio que refleje con mayor precisión los cambios en el fondo que puedan haber ocurrido desde la valoración anterior.