CFA vs. CFP®: ¿Cuál es la diferencia?
CFA vs. CFP: una descripción general
Las diferencias entre un analista financiero colegiado (CFA) y un planificador financiero certificado (CFP ®) son muchas. Pero la principal distinción a menudo se reduce al hecho de que un CFP® trabaja con clientes individuales para lograr sus objetivos financieros personales, mientras que un CFA se enfoca en invertir en situaciones corporativas a gran escala.
Conclusiones clave
- CFA y CFP® son dos credenciales financieras ampliamente reconocidas y respetadas obtenidas por profesionales.
- El programa CFA es muy amplio y podría describirse más adecuadamente como el equivalente a una maestría en finanzas con menores acompañantes en contabilidad, economía, análisis estadístico y administración de carteras.
- El enfoque de CFP® es capacitar a los asesores financieros para crear e implementar planes financieros para inversores.
Planificador financiero certificado (CFP®)
Un planificador financiero certificado (CFP®) ayuda a las personas a planificar su futuro financiero. Las PPC no se centran únicamente en las inversiones; ayudan a sus clientes a alcanzar metas financieras específicas a largo plazo, como ahorrar para la jubilación, comprar una casa o iniciar un fondo universitario para sus hijos.
Para convertirse en un CFP®, una persona debe completar un curso de estudio y luego aprobar un examen de dos días. El examen cubre gestión de patrimonio, planificación fiscal, seguros, planificación de jubilación, planificación patrimonial y otros temas básicos de finanzas personales. Todos estos temas son importantes para alguien que busca ayudar a sus clientes a alcanzar sus metas financieras.
Analista financiero colegiado (CFA)
Un CFA, por otro lado, realiza inversiones en entornos más grandes, normalmente para grandes empresas de inversión tanto del lado de la compra como del lado de la venta, fondos mutuos o fondos de cobertura. Los CFA también pueden proporcionar análisis financieros internos para corporaciones que no están en la industria de inversiones. Mientras que un CFP® se centra en la gestión y planificación patrimonial para clientes individuales, un CFA se centra en la gestión patrimonial de una corporación.
Para convertirse en CFA, una persona debe completar un curso de estudio riguroso y aprobar tres exámenes en el transcurso de dos o más años. Además, el candidato debe adherirse a un estricto código de ética y tener cuatro años de experiencia laboral en un entorno de toma de decisiones de inversión.
Diferencias clave
La principal diferencia entre las dos designaciones tiene que ver con el rol o trabajo que le interesa principalmente al individuo. Es muy probable que la capacitación y el plan de estudios ofrecidos por los planificadores financieros certificados y los servicios que brinden cubran la prestación de asesoramiento y planificación financieros a personas y familias. Estos incluyen recomendar carteras de inversión, productos de seguros y orientación fiscal.
Los titulares de la CFA, por otro lado, es más probable que trabajen para una institución financiera como un banco, un fondo de cobertura, una pensión o una compañía de fondos mutuos. Estos profesionales administran activamente carteras, participan en estudios de renta variable o análisis financiero y comercializan activos como derivados, materias primas o divisas.
Aún así, algunos titulares de CFA pueden participar en asesoría financiera o ejecutar una práctica de asesoría. Asimismo, las personas con credenciales CFP® pueden trabajar para un banco o una empresa comercial. En algunos casos, es deseable tener ambas designaciones para lograr un conjunto completo de habilidades y conocimientos para el trabajo que realiza.
Al elegir una designación para seguir, pregúntese qué tipo de trabajo desea hacer, dónde desea trabajar y si desea trabajar como empleado con un salario garantizado o como empresario donde el cielo (y el sótano) es el límite. Independientemente de cuál elija, cada una de estas designaciones financieras brindará amplias oportunidades profesionales para quienes inviertan el tiempo y la energía para obtenerlas.
Advisor Insight
Scott Bishop, CPA, PFS, CFP® STA Wealth Management, LLC, Houston, TX
Con todas las designaciones y acrónimos en la industria de servicios financieros, no es sorprendente que estos términos que suenan similares puedan confundirlo.
Convertirse en CFP o CFA es difícil. Cada uno tiene exámenes rigurosos que deben aprobarse. Ambos también requieren educación continua para mantener la designación.
Los CFP asesoran principalmente a las personas, pero algunos también asesoran a los propietarios de pequeñas empresas. Los CFP también ayudan con la planificación de la jubilación, la inversión y otra planificación financiera.
Por otro lado, los CFA asesoran a diversas instituciones, como bancos, fondos mutuos, fondos de pensiones, compañías de seguros y firmas de valores. Se centran en acciones y análisis de mercado, lo que ayuda a las empresas e instituciones a tomar buenas decisiones de inversión. Los CFA también reúnen asignaciones de cartera para individuos.