Desinversión
¿Qué es la desinversión?
La desinversión es la acción de una organización o gobierno que vende o liquida un activo o una subsidiaria. En ausencia de la venta de un activo, la desinversión también se refiere a las reducciones de gastos de capital (CapEx), que pueden facilitar la reasignación de recursos a áreas más productivas dentro de una organización o proyecto financiado por el gobierno.
Ya sea que la desinversión dé como resultado la desinversión o la reducción de la financiación, el objetivo principal es maximizar el retorno de la inversión (ROI) relacionado con los bienes de capital, la mano de obra y la infraestructura.
Conclusiones clave
- La desinversión es cuando los gobiernos u organizaciones venden o liquidan activos o subsidiarias.
- Las desinversiones pueden tomar la forma de desinversiones o una reducción de los gastos de capital (CapEx).
- La desinversión se lleva a cabo por una variedad de razones, como estratégicas, políticas o ambientales.
Entendiendo la desinversión
Las desinversiones, en la mayoría de los casos, están motivadas principalmente por la optimización de los recursos para generar la máxima rentabilidad. Para lograr este objetivo, la desinversión puede tomar la forma de venta, escisión o reducción de los gastos de capital. Las desinversiones también pueden llevarse a cabo por razones políticas o legales.
Tipos de desinversión
Mercantilización y segmentación
Dentro del mercado objetivo de productos básicos, una empresa puede identificar segmentos de productos que ofrecen una mayor rentabilidad que otros, mientras que los gastos, los recursos y la infraestructura necesarios para la fabricación siguen siendo los mismos para ambos productos.
Por ejemplo, una empresa puede determinar que su división de herramientas industriales está creciendo más rápido y generando mayores márgenes de beneficio que su división de herramientas de consumo. Si la diferencia en la rentabilidad de las dos divisiones es lo suficientemente grande, la empresa puede considerar desinvertir (por ejemplo, vender) la división de consumo. Después de la desinversión, la empresa podría asignar tanto los ingresos por ventas como los gastos de capital recurrentes a la división industrial para maximizar su ROI.
Activos inadecuados
Una empresa puede optar por la desinversión de ciertos activos de una empresa que ha adquirido, especialmente si esos activos no se ajustan a su estrategia general. Por ejemplo, una empresa enfocada en operaciones domésticas puede vender la división internacional de una empresa que ha comprado, debido a las complejidades y costos de integración, así como operarla de manera continua.
Como resultado de la desinversión, la empresa adquirente puede reducir el costo total de la compra y determinar el uso óptimo de los ingresos, que puede incluir reducir la deuda, mantener el efectivo en el balance o realizar inversiones de capital.
Político y Legal
Las organizaciones pueden decidir la desinversión de participaciones que ya no encajan con sus posiciones sociales, ambientales o filosóficas. Por ejemplo, la Fundación de la Familia Rockefeller, que obtuvo su riqueza del petróleo, se deshizo de sus tenencias de energía en 2016 debido a declaraciones falsas de compañías petroleras sobre el calentamiento global.
Las empresas consideradas monopolios pueden estar obligadas legalmente a desinvertir participaciones para garantizar una competencia leal. Por ejemplo, después de que se descubrió que era un monopolio después de ocho años en los tribunales, AT&T vendió sus siete compañías operativas regionales en 1984. Después de la desinversión, AT&T retuvo sus servicios de larga distancia, mientras que las compañías operativas, conocidas como Baby Bells, proporcionaron servicios regionales.
Ejemplo de desinversión
La desinversión en combustibles fósiles es el ejemplo más destacado y reciente de desinversión política y relacionada con el medio ambiente. En 2011, los estudiantes en los campus universitarios comenzaron a exigir que sus fundaciones de donaciones, que son algunos de los inversionistas institucionales más ricos del mundo, comenzaran a deshacerse de sus participaciones en compañías de combustibles fósiles porque eran los principales contaminadores de carbono.
El movimiento abarca 37 países y ha resultado en la venta de activos por valor de 6.2 billones de dólares, según un informe de septiembre de 2018 de Arabella Advisors. Mil inversores institucionales, incluidas compañías de seguros, fondos soberanos y fondos de pensiones, se han comprometido a desinvertir activos relacionados con combustibles fósiles. El informe atribuye el aumento de las desinversiones relacionadas con combustibles fósiles a la presión moral que dio paso a imperativos financieros y fiduciarios a medida que el movimiento crecía y las acciones de las principales compañías petroleras caían.
Mientras tanto, Weyerhaeuser Co. (WY) es un ejemplo de desinversión estratégica. La empresa con sede en Washington era un fabricante de papel y productos de papel hasta 2004. Desde ese año, ha desinvertido sus operaciones vendiendo sus negocios de fabricación de pulpa y papel para concentrarse en bienes raíces y madera.