Transacción en efectivo y en acarreo
¿Qué es una transacción Cash and Carry?
Una transacción de efectivo y acarreo es un tipo de operación en el mercado de futuros que ocurre cuando el precio de un activo subyacente es diferente al de su correspondiente derivado. Las transacciones de efectivo y acarreo se consideran arbitraje y se realizan con efectivo o en el mercado al contado.
Una transacción de efectivo y acarreo generalmente implica tomar una posición larga en un valor o materia prima mientras se vende simultáneamente el derivado asociado, específicamente mediante la venta al descubierto de un contrato de futuros u opciones. A veces también se conoce como trading básico.
Conclusiones clave
- Una transacción de efectivo y acarreo ocurre cuando el precio al contado de un producto básico se cotiza por debajo del precio del contrato de futuros.
- Las transacciones de efectivo y acarreo pueden presentar oportunidades de arbitraje en los mercados al contado y de futuros en el mismo producto básico subyacente.
- Esta diferencia de precio se debe típicamente a ineficiencias en el mercado, en contraposición a errores absolutos de precios; la mayoría de las veces, estas ineficiencias se detectan y se solucionan rápidamente.
Comprensión de una transacción de efectivo y acarreo
Las transacciones de efectivo y acarreo se consideran acuerdos de arbitraje porque aprovechan los diferentes puntos de precio entre acciones, productos básicos y activos similares en diferentes mercados y formas. Esta diferencia de precio se debe típicamente a ineficiencias en el mercado, en contraposición a errores de precios. Un mercado ineficiente, según la hipótesis del mercado eficiente, es aquel en el que los precios de mercado de un activo no siempre reflejan con precisión su valor real.
La mayoría de las veces, estas diferencias de precios se detectan y se solucionan rápidamente. Las transacciones de cash and carry pueden tener lugar en cualquier mercado donde exista un mecanismo de entrega física. Aunque se cree que este tipo de comercio está prácticamente libre de riesgos, hay algunos casos en los que no es rentable. Hay ciertos factores que deben analizarse frente a las posibles ganancias de la operación, incluidas las tarifas, los costos de mantenimiento y los dividendos adeudados.
Ejemplo de una transacción de efectivo y acarreo
Suponga que las acciones de Coca-Cola Co. (KO) se cotizan a 40 dólares la acción en la bolsa de valores, pero cotizan a 50 dólares la acción en la bolsa de futuros. Un comerciante tendría que comprar las acciones a $ 40 por acción en el acto, y luego vender el precio de futuros a $ 50 por acción. El comerciante mantendría sus acciones KO hasta el vencimiento del contrato de futuros. Al vencimiento, el activo subyacente se convierte en entregable en el contrato de futuros a corto. Aquí, el comerciante entrega las acciones por $ 50 y obtiene una ganancia de $ 10, o un rendimiento del 10%, sobre el efectivo y el carry trade (sin incluir costos ni tarifas).
Considere otro ejemplo en el que la acción de KO se cotiza a $ 80 por acción, pero se cotiza a $ 100 por acción en el mercado de futuros. Ahora, el margen de beneficio ha aumentado, y después del corto de los futuros a $ 100, hay un beneficio de $ 20 (20% de retorno) sobre la inversión inicial ( ROI ).
Es fácil ver cómo la manipulación de las transacciones de arbitraje puede generar una ganancia significativa con aparentemente poco riesgo. Un comerciante puede obtener ganancias con este tipo de comercio, pero es cada vez más difícil encontrar estas ineficiencias en el mundo moderno de transacciones automatizadas.