Definición de saldo de débito ajustado
¿Qué es un saldo de débito ajustado?
Un saldo deudor ajustado es el monto en una cuenta de margen que se adeuda a la firma de corretaje, menos las ganancias de las ventas al descubierto y los saldos en una cuenta miscelánea especial (SMA). Los saldos de débito se pueden contrastar con los saldos de crédito, que son fondos adeudados a la cuenta de margen de un cliente por su corredor.
Conclusiones clave
- Un saldo deudor ajustado es la cantidad en una cuenta de margen que se adeuda a la firma de corretaje, menos las ganancias de las ventas al descubierto y los saldos en una cuenta miscelánea especial (SMA).
- Bajo la Regulación T, uno puede pedir prestado hasta el 50% del precio de compra de valores en margen.
- Los saldos de débito se pueden contrastar con los saldos de crédito, que son fondos adeudados a la cuenta de margen de un cliente por su corredor.
Cómo funcionan los saldos de débito ajustados
Un saldo deudor, en general, es lo que un cliente le debe a su corredor en una cuenta de margen, una cuenta que permite a los inversionistas tomar prestados fondos para comprar valores, siempre que tengan efectivo o valores para pignorar como garantía y pagar al prestamista una tasa de interés periódica..
El uso del margen de negociación ( apalancamiento ) en una cuenta de inversión con el fin de comprar valores amplifica las ganancias o pérdidas asociadas con esas operaciones. Para ayudar a reducir las pérdidas significativas experimentadas por las firmas de corretaje y los inversores debido a la negociación de márgenes no regulados, se establecieron las directrices de la Regulación T (REG T) y la regla del 50%, que estipula que un inversor puede pedir prestado hasta el 50% del precio de compra de un valor en margen.
Reg T limita la cantidad de crédito que un inversionista puede obtener de su corredor para comprar valores con margen.
El saldo deudor ajustado informa a los inversores cuánto deben en caso de una llamada de margen, una demanda de efectivo o valores adicionales para llevar una cuenta de margen hasta el margen mínimo de mantenimiento. Este saldo se pone a disposición de los clientes con regularidad, lo que garantiza que siempre puedan controlar los fondos prestados que deben devolver a la firma de corretaje.
La Autoridad Reguladora de la Industria Financiera (FINRA) ha establecido el margen de mantenimiento mínimo en el 25% del valor total de los valores en una cuenta de margen. Sin embargo, las firmas de corredores a menudo requieren que sus clientes tengan más capital.
Consideraciones Especiales
Los inversores deben ser conscientes de las implicaciones de la negociación con margen y la importancia de comprobar periódicamente el saldo deudor de una cuenta de margen.
Los corredores tienen el poder de exigir que los clientes aumenten la cantidad de capital que tienen en la cuenta en cualquier momento. También se les permite vender los valores en ellos, a veces sin siquiera consultar con el inversionista, para cumplir con cualquier margen de mantenimiento que se haya especificado y demandar a los clientes que tienen un saldo negativo y no cumplen con una llamada de margen.