Brecha inflacionaria
¿Qué es una brecha inflacionaria?
Una brecha inflacionaria es un concepto macroeconómico que mide la diferencia entre el nivel actual del producto interno bruto (PIB) real y el PIB que existiría si una economía funcionara en pleno empleo.
Conclusiones clave
- Una brecha inflacionaria mide la diferencia entre el nivel actual del PIB real y el PIB que existiría si una economía operara en pleno empleo.
- Para que la brecha se considere inflacionaria, el PIB real actual debe ser superior al PIB potencial.
- Las políticas que pueden reducir una brecha inflacionaria incluyen reducciones en el gasto público, aumentos de impuestos, emisiones de bonos y valores, aumentos de las tasas de interés y reducciones en los pagos de transferencias.
Comprender una brecha inflacionaria
Existe una brecha inflacionaria cuando la demanda de bienes y servicios excede la producción debido a factores tales como niveles más altos de empleo general, aumento de las actividades comerciales o gasto público elevado.
En este contexto, el PIB real puede superar el PIB potencial, lo que se traduce en una brecha inflacionaria. La brecha inflacionaria se denomina así porque el aumento relativo del PIB real hace que una economía aumente su consumo, lo que lleva a que los precios suban a largo plazo.
Para que la brecha se considere inflacionaria, el PIB real actual debe ser más alto que el PIB de la economía en pleno empleo, también conocido como PIB potencial.
La brecha inflacionaria representa el punto del ciclo económico en el que la economía se está expandiendo. Debido al mayor número de fondos disponibles dentro de la economía, los consumidores están más inclinados a comprar bienes y servicios. A medida que aumenta la demanda de bienes y servicios pero la producción aún no ha compensado el cambio, los precios suben para restablecer el equilibrio del mercado.
Cuando el PIB potencial es superior al PIB real, la brecha se denomina brecha deflacionaria. El otro tipo de brecha de producción es la brecha recesiva, que describe una economía que opera por debajo de su equilibrio de pleno empleo.
Cálculo del producto interno bruto real (PIB)
Según la teoría macroeconómica, el mercado de bienes determina el nivel del PIB real, que se muestra en la siguiente relación. Para calcular el PIB real, primero calcule el PIB nominal :
Y = C + I + G + NX
Dónde:
- Y = PIB nominal
- C = gasto de consumo
- I = inversión
- G = gasto público
- NX = exportaciones netas
Luego, el PIB real = Y / D, donde D es el deflactor del PIB, lo que hace que la inflación entre en vigor a lo largo del tiempo.
Un aumento en el gasto de consumo, las inversiones, el gasto público o las exportaciones netas hace que el PIB real aumente a corto plazo. El PIB real proporciona una medida del crecimiento económico al tiempo que compensa los efectos de la inflación o la deflación. Esto produce un resultado que explica la diferencia entre el crecimiento económico real y un simple cambio en los precios de los bienes o servicios dentro de la economía.
Política fiscal y monetaria para manejar la brecha inflacionaria
Un gobierno puede optar por utilizar la política fiscal para ayudar a reducir una brecha inflacionaria, a menudo mediante la disminución del número de fondos que circulan dentro de la economía. Esto se puede lograr mediante reducciones en el gasto público, aumentos de impuestos, emisiones de bonos y valores y reducciones en los pagos de transferencias.
Estos ajustes a las condiciones fiscales dentro de la economía pueden servir para restablecer el equilibrio económico. A medida que disminuye la cantidad de dinero en circulación, la demanda general de bienes y servicios también disminuye, lo que reduce la inflación.
Los bancos centrales también tienen herramientas a su disposición para combatir la actividad inflacionaria. Cuando la Reserva Federal (Fed) sube las tasas de interés, encarece el préstamo de fondos.
Posteriormente, una política monetaria estricta debería reducir la cantidad de dinero disponible para la mayoría de los consumidores, lo que provocaría una menor demanda y una reducción de los precios o de la inflación. Una vez que se alcanza el equilibrio, la Fed u otro banco central pueden cambiar las tasas de interés en consecuencia.