19 abril 2021 17:18

Deshonra

¿Qué es el deshonor?

La deshonra, en el mundo empresarial, es la acción de negarse a cumplir con las obligaciones contractuales o pagar un cargo. La deshonra de una transacción puede ocurrir si un vendedor no entrega los bienes prometidos o cuando el comprador no paga por los bienes recibidos.

En los contratos, una de las partes puede deshonrar el acuerdo al alterar las especificaciones, entregar el pago atrasado o los bienes, o no cumplir con sus deberes requeridos. Cuando una de las partes ha roto un acuerdo o una promesa, se dice que es deshonrada. Deshonrar una obligación contractual puede ser un incumplimiento de contrato.

Conclusiones clave

  • En el mundo empresarial, el deshonor se refiere a la acción de incumplir las obligaciones contractuales.
  • El deshonor ocurre cuando el vendedor no entrega los productos prometidos o no lo hace a tiempo, o cuando un comprador no paga por lo que acordó comprar.
  • Deshonrar un contrato tiende a tener consecuencias inmediatas y perjudiciales, como la suspensión del servicio, el cobro de tarifas o incluso el daño al crédito.
  • Si el contrato se cumple posteriormente, o si finalmente se realiza el pago vencido, la parte que rechazó el contrato inicial puede encontrar que se le cobran tarifas adicionales para restablecer el servicio o concluir una transacción de venta.

Entender el deshonor

Una notificación de deshonra es una notificación que el titular de un instrumento de pago da al endosante o librador, notificándoles que el pago ha sido deshonrado o rechazado. Por ejemplo, un cheque que se devuelve sin pagar porque no hay fondos suficientes para el pago en la cuenta de la que se gira, puede ir acompañado de un aviso de incumplimiento, informando al librador que el pago ha sido rechazado.

Un aviso de deshonra debe identificar la factura, pagaré o instrumento que se está deshonrando y notificar a todas las partes requeridas dentro de un período de tiempo razonable.

Consecuencias de los pagos y contratos rechazados

En la mayoría de los casos, el incumplimiento de un contrato puede resultar en que la otra parte rescinda sus obligaciones. Por ejemplo, supongamos que tiene un contrato en el que acordó pagar una tarifa mensual por el servicio telefónico. Si no está satisfecho con el servicio y decide protestar negándose a pagar la tarifa, estaría incumpliendo el contrato. Como resultado, la compañía telefónica probablemente cortará su servicio, rescindiendo así su contrato, hasta que realice el pago.

Se puede imponer una tarifa o una multa por no cumplir con un contrato o por proporcionar como pago un instrumento negociable que no se puede cumplir. Si, en el ejemplo anterior, eventualmente realizó el pago de su servicio telefónico, la compañía se reservaría el derecho de cobrar una tarifa adicional para restablecer su contrato, porque lo deshonró.

En algunos casos, deshonrar un contrato también puede dejarlo obligado a pagar los fondos que aún se adeuden de acuerdo con los términos del contrato.

Cuando se rechaza un título negociable, como en el caso de un cheque devuelto o rechazado, también puede incurrir en un cargo del banco o la institución por la que se gira el título. La mayoría de los bancos cobran una tarifa por pagar un cheque girado en una cuenta con fondos insuficientes o por sobregirar una cuenta.